En esta sesión tuve que realizar una presentación oral sobre el
análisis de un proyecto CLIL/AICLE en un centro de Secundaria. Para empezar,
debemos responder a la pregunta: ¿Qué significa CLIL/AICLE? Estas siglas significan Content and Language Integrated Learning y Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lengua Extranjera.
Pero, ¿qué quiere decir esto?: Quiere decir que los objetivos del aprendizaje de la lengua son aprender contenido del área
de estudio y aprender a comprender y comunicar. Es decir, en la metodología
CLIL, el aprendizaje de lengua extranjera se lleva a cabo en materias que no
tienen por qué ser específicas de lengua. Por ello, el profesor CLIL debe tener
en cuenta tanto el currículo de la materia como lo que Dalton-Puffer denomina language curriculum. De este modo es la
materia que se estudia la que determina el vocabulario, las estructuras o el
tipo de discurso a aprender. Esto hace que resulte imprescindible la
colaboración entre los especialistas de la L2 y de las distintas materias.
Además, en esta metodología es más
importante la fluidez que la corrección gramatical y lingüística, ya que esto
favorecerá que el aprendizaje se desarrolle con confianza y sea por tanto más
efectivo. Sin embargo, pueden aprovecharse las oportunidades que surjan para
matizar imprecisiones lingüísticas ya que esto puede afectar a la precisión y
producción de contenido a largo plazo. Para esto, es común que se utilice la
técnica de andamiaje o scaffolding
que ya conocéis.
Por último, Coyle (1999) defiende que
una lección CLIL bien formulada debería estar integrada por lo que denomina las
4 Cs del currículo:
- Contenido: Permite progresar en el conocimiento y la comprensión
de temas específicos.
- Comunicación: Se usa la lengua para aprender y a su vez se aprende a
usar la lengua.
- Cognición: Desarrollo de las destrezas cognitivas al unir la
formación de conceptos (abstractos y concretos), los conocimientos y la lengua.
- Cultura: Diversidad de perspectivas y conocimientos lo que
produce una mayor consciencia de los otros y uno mismo.
La Junta de Andalucía se ha mostrado muy a favor de este tipo de
metodología y ha creado un directorio web en donde se recogen más de 60
secuencias didácticas AICLE. Yo he analizado una de ellas correspondiente a 2º
de la ESO y que trata sobre las Energías Renovables, tema que se incluye en el
currículo de Ciencias Naturales de este curso.
La temporalización está prevista como 5 sesiones de 60 minutos y los
contenidos consisten en conocer la definición de energía así como las energías
fósiles y las renovables. El documento en el que se detalla esta unidad
didáctica especifica también los contenidos lingüísticos que se tratarán,
dividiéndolos en funciones, estructuras y léxico. Además, los criterios de
evaluación se basan en el correcto trabajo por parejas para búsqueda de
información, la exposición clara de información de forma oral y escrita y un
buen trabajo en grupo mediante participación y argumentación de opiniones.
Para poner en práctica esta unidad se elaboró una especie de dossier
para los alumnos que se compone de una serie de ejercicios tanto individuales
como en parejas o grupo. Sobre todo al principio, se incluyen también
actividades de listening y reading en las que se provee al alumno con
información básica sobre el tema. En esta unidad, se integra el uso de las TIC
ya que en varias ocasiones el alumnado tiene que investigar en internet para
obtener respuestas a alguna pregunta o ejercicio guiado. También hay alguna
actividad de debate en grupos, cuyas conclusiones deben ponerse por escrito
mediante una redacción individual. Las redacciones serán leídas en la clase y
un integrante de cada grupo podrá participar en una mesa redonda llamada
‘Renewable or non renewable, that’s the question’ con los representantes de los
otros grupos. En los últimos diez minutos, todos los alumnos podrán participar.
Esto es un ejemplo de un debate piramidal, ya que las opiniones y conclusiones
de grupos pequeños se ponen en común en grupos cada vez más grandes, aunque
contando con un representante. Finalmente, se incluye un cuestionario que sigue
una estructura similar a los KPSI en el que el alumnado debe autoevaluarse para
comprobar si ha alcanzado los objetivos de la unidad.
Podríamos decir por tanto que esta unidad cumple los objetivos de la
metodología CLIL: Aprender contenidos relativos a las energías renovables y
aprender a comprender y comunicar. Quizá un punto negativo que se podría
mencionar de esta unidad es que no es interdisciplinar como propone la LOMCE,
ya que aunque se utilice la lengua inglesa como vehículo, los contenidos de
esta materia no se tratarán de otros modos en ninguna otra materia. Es quizá
por esto que existe una rivalidad entre la metodología CLIL / AICLE y el
aprendizaje por proyectos aunque la mayoría de expertos coinciden en que lo
mejor es combinar ambas metodologías. Por lo tanto, sería interesante poner en
práctica los contenidos de esta unidad mediante un enfoque por proyectos que
emplee la metodología CLIL para poder comparar los resultados.
Referencias
Coyle, D. (1999). ‘The next stage? Is there a Future for the Present?
The Legacy of the “Communicative Approach.”’ Francophonie, 19, pp. 13-16.
Dalton-Puffer, C. (2007). Discourse in CLIL Classrooms. Amsterdam:
Benjamins.
Galán, D. Secuencias AICLE elaboradas por el profesorado: Renewable
Energy. Junta de Andalucía. Recuperado de:
http://www.juntadeandalucia.es/educacion/webportal/descargas/plurilingüismo/Flash/aicle-cep/resources/cariboost_files/s15.pdf
Grenfell, M. (ed.). (2002). Mode
No hay comentarios:
Publicar un comentario